Para la realización de esto, Don Bosco nos ha regalado su Sistema
Preventivo que es la esencia de toda su experiencia
pedagógica y espiritual y que fue recogiendo en el contacto con
los jóvenes, contacto vivido con entusiasmo, con fe en la providencia,
fiel a la Iglesia fundada por Cristo, mirando con realismo el entorno
social y con una confianza inmensa en María Auxiliadora.
Un Proyecto Educativo Salesiano no se puede concebir sin tener como punto
de partida a Don Bosco y su experiencia. Las
iniciativas dejadas por él para hacer frente a los problemas de
la juventud deben enfrentarse con la misma mentalidad práctica
que aplicó.
El trabajo asumido por los componentes de la comunidad educativa al elaborar
este proyecto, ha tenido como referencia
constante, además de las líneas doctrinales proclamadas
por la Iglesia y la Congregación, la persona del joven que queremos
formar, pues desde él parte la propuesta educativa, ofreciendo
una posibilidad de camino de desarrollo planificado en Cristo. Nadie en
consecuencia, puede quedar fuera.
Jesús
ilumina todo el Proyecto Educativo - Pastoral, quien en su misión
salvadora nos invitó a ser persona, siguiéndolo a El,
dignificándonos como hombre. Parte de los esfuerzos de la comunidad
educativa patrociniana en desarrollo están reflejados en nuestra
propuesta educativa y pastoral, tratando de construir un ambiente formativo
en donde se
potencien los valores de vida, transformados en comunión con la
Iglesia y vividos en el espíritu de Don Bosco.
II. Historia
Don Blas Cañas Calvo, distinguido sacerdote chileno, visitando
la obra salesiana en Europa y siguiendo la sugerencia de Don Rúa
quien le recomendó: "Piense en formar una casa para niños
hombres, lo que será para mayor honra y gloria de Dios", ya
de regreso en Santiago, funda en 1873 El Patrocinio de San José,
cuya finalidad era recibir y educar cristianamente a niños huérfanos
y desvalidos provenientes de familias de buena condición social,
venidas a menos.
Constituido el primer consejo directivo y a insinuación de Doña
Carmen Lira y Argomedo, se dio a la futura casa el nombre de Patrocinio
de San José, título que fue aceptado unánimemente.
En 1894 y ante la insistencia del Arzobispo de Santiago, los salesianos
se hacen cargo de la dirección material y espiritual de nuestro
colegio contando a la fecha con 144 alumnos.
Su primer Director fue Monseñor José Fagnano, entonces Inspector
de la provincia salesiana de Chile quien nombró en forma
interina al padre Víctor Durando. Le sigue el padre Mario Migone,
primer salesiano oriundo de América y conocido por Don Bosco.
Entre los primeros alumnos del Patrocinio de San José, cabe destacar
a Clemente Díaz León, Director de El Mercurio de
Santiago; dos obispos salesianos: Don Abraham Aguilera y Don Arturo Jara
Márquez, además los sacerdotes salesianos Luis Amadeo Rojas,
Leopoldo Chazal, Juan Bautista Torres y otros.
Desde el edificio de la calle Santa Rosa 590 y ante un ofrecimiento del
Arzobispo de Santiago, nuestro colegio se trasladó
a la actual ubicación de Bellavista 0550 en donde funcionaba la
Escuela Normal de Preceptores Católicos. Esto ocurría en
1926. El Primer Director en la nueva sede fue el Padre Valentín
Panzarasa.
Sucesivas construcciones y remodelaciones fueron dando forma a lo que
hoy tenemos: Capilla, Salón, edificio de calle Bellavista, antiguos
dormitorios transformados en salas de clases, campo deportivo, laboratorios,
taller de computación, auditorio, etc.
|